sábado, 18 de mayo de 2013

Aceptar la derrota


¿Qué personas, circunstancias, hacen que una persona se  sienta mal, inferior, que no encaje, se comporte pasivamente, y tenga la sensación de no poder superar esta situación?

No somos  conscientes de esos momentos en que algo o alguien nos está influenciando, e igualmente no tenemos tantos recuerdos como para poder deducir que nos pudo influenciar.

Nos creemos las cosas sin cuestionar, aceptamos casi todo como posible o imposible sin preocuparnos de porque pensamos así, o  mejor porque nos  sentimos así y no tenemos posibilidad de cambiar porque si no investigamos, no daremos con la respuesta. Y no investigamos porque no nos sentimos capaces y es la pescadilla que se muerde la cola.

Es posible que en algún momento nos construyéramos un ideal de cómo queríamos ser, de todo lo que queríamos conseguir. Casi todos los niños queremos ser pilotos, astronautas, futbolistas, etc, . En cierto modo nuestro ideal es ser grandes. “ Tal vez esa fue una de nuestras ideas inculcadas en nuestra cabeza. Idea que no se muy bien si era innata o impuesta.

Un día, descubrimos que no destacamos, que  siempre parece haber alguien que lo hace mejor, o sabe más, o es más feliz, o tiene más suerte. Y entonces dejas de creer en ti. Y aprendes a reaccionar con la seguridad de que no lo conseguirás.

Y como el elefante de la estaca, olvidas tu capacidad , tu fuerza, tu ideal y te das por vencido.

El subconsciente a aprendido a fracasar, lo ha admitido como posible y la persona no es capaz de verse a si mismo en tal estado, porque no sabe que le pasa. Cuando se desanima, ya no es posible dar con la respuesta , como le ocurre a los niños de la izquierda del video, que a la segunda equivocación, no son capaces de pensar, o lo que nos ocurre cuando hacemos un examen. Si el primer problema nos sale mal, ya estamos toda la hora en estado tenso y apurados, sabiendo que no lo vamos a conseguir. Por eso queremos comenzar con las preguntas que mejor nos sabemos, para animarnos a nosotros mismos.

Podríamos contestar a la pregunta inicial  diciendo que no son las personas y circunstancias las que nos influyen , para sentirnos mal o bien, aceptadas , inferiores o pasivas, sino nuestras ideas que tenemos dentro de nuestra cabeza y que afortunadamente podemos borrar y escribir otras que nos gusten más y nos ayuden a solucionar los problemas que la indefensión adquirida nos pueda estar provocando.

 

No hay comentarios:

Publicar un comentario