domingo, 17 de febrero de 2013

Tiemblo, no de frío

Miedo, tantas cosas que decir del miedo… nunca pensé que cinco letras diesen tanto que hablar. Aún siendo algo que abarca tanto, no sabría bien como definirlo, bueno, al igual que todos los sentimientos. Supongo que todo el mundo ha sentido miedo alguna vez, supongo que a todo el mundo hay algo que le da miedo porque si el miedo no existiese ¿Qué sería de nosotros? Haríamos las cosas sin pensar en las consecuencias, ya que lo que nos lleva a pensar si lo que estamos haciendo nos puede traer algo malo después, es el miedo, el miedo a que no salga bien, el miedo a no saber cómo acabar lo que hemos empezado, en definitiva, el miedo. No sé cómo, pero te frena, y hace que pienses las cosas dos veces antes de hacerlas. Hay tantas cosas que pueden dar miedo, que sería incapaz de nombrarlas todas, pero hay algunas de las que estoy muy segura, miedo a la muerte, a la soledad, al dolor, al fracasar. No debería tener miedo a algunas de estas cosas, ya que tienen solución, y si cayese, antes o después me levantaría ya que cuando tocas fondo, la única opción es levantarte, pero hay otras a las que soy incapaz de no temer, y yo diría que por suerte. Si no tuviésemos miedo a la muerte, nos lanzaríamos a las vías del tren, sin nada que nos frenase. Por suerte, todos tenemos presente este sentimiento, hasta el que intenta aparentar ser el más valiente, en una situación límite, el miedo se apoderará de él, quiera o no, aparece sin avisar, es algo incontrolable. Es algo que está presente desde que nacemos, y siempre que llega tendemos a aferrarnos a algo o alguien que hace que este sentimiento no desaparezca, pero si sea menor. Me he dado cuenta, que si estás acompañado, el miedo disminuye, aunque sea por alguien que ni siquiera conoces, pero al ver que no estás solo, el miedo afloja, y esto me ha llevado a pensar, que a lo mejor lo que verdaderamente nos da miedo, es la soledad. Al fin y al cabo es normal tener miedo a esto, no estamos hechos para vivir solos. 

                                
Hay personas que temen al futuro, yo diría que es una falta de confianza ante lo que pueda pasar. Este miedo no lo entiendo, pero claro, como lo voy a entender si yo pienso que lo que tenga que pasar, va a pasar tarde o temprano. Yo diría que es un miedo absurdo, ya que tu futuro lo creas tú, sin darte cuenta, pero lo vas creando poco a poco, con cada paso que das, cada pensamiento, o cada acción. Y si vives con miedo a lo que venga después, no se llega a nada, el miedo es bueno, pero como dicen, todo en exceso hace daño, no hay que dejar que tome un papel principal en nuestra vida, hay que ir dejándose llevar por las situaciones, ir avanzando, y creciendo, y así llegar a tener lo que todos queremos, un futuro ideal, aunque a veces la suerte no esté de nuestro lado, pero yo pienso que si quieres algo, lo acabas consiguiendo, todo es cuestión de tiempo.
Hay miedos que duran para siempre, y miedos pasajeros, que al pasar un rato desaparecen. Puede que sientas miedo, un miedo extremo, de ese miedo que hace que todos los músculos de tu cuerpo se contraigan, y que al pasar un tiempo, basta con unas horas o simples minutos, desaparezca, porque tu mente se centra en otras cosas, en realidad no sé bien porque, pero desaparece.

En definitiva, el miedo no es tan malo como parece, como ya he dicho, yo pienso que es bueno, el miedo tiene un papel importante en nuestras vidas, pero no hay que dejar que llegue a tener el papel principal.

No hay comentarios:

Publicar un comentario