sábado, 20 de octubre de 2012


NUESTRO FIEL ACOMPAÑANTE


Cuando fuimos pequeños, con la muerte de alguien, o de un ser querido no éramos conscientes de lo que pasaba, muchos padres además trataban de ocultárnoslo como si fuera algo por lo que pasaríamos el resto de nuestras vidas traumatizados, sin embargo, ya tocaría reflexionar un poco sobre este tema para que seamos conscientes, que está hasta en la sopa, y con ello deberíamos plantearnos algunas preguntas que tratarán de rellenar un poco esa curiosidad y por otra parte de tranquilizarnos y no temer a lo que vaya a pasar , porque lo que va a pasar, está en el destino, para los que creen el destino, o en la suerte ,para los que se muevan por la suerte, y no se podrá cambiar.


Todo ser racional tiene que llenar un vacío, el de la curiosidad, todas esas preguntas que nos hacemos a lo largo de nuestra vida, en cada momento, en cada situación en la que nos veamos involucrados, esas preguntas que se encarga de formular y entornar respuesta la filosofía, o simplemente ya están planteadas y fueron respondidas por la ciencia, esas preguntas que cuanto más conocemos y manejamos, más realizados, nos sentimos y si otra pregunta que nos formulemos ,no tiene respuesta correcta , una pregunta que nos inquieta por conocer la verdad, tal vez sea este el motivo por el que nos de miedo la muerte , porque es un enigma, un misterio sin resolver, y cada respuesta que intentamos dar ,la hacemos una pregunta todavía más difícil.
Con el tiempo me he preguntado sobre la muerte, ¿Qué es la muerte?, ¿Cómo afrontamos la vida sabiendo que un día vamos a morir?, ¿Cómo nos recordarán, o pasaremos a un mero recuerdo?, ¿Qué nos encontraremos después de la vida?, ¿Qué sentido tendría la muerte?
Bien hay personas que le dan mucha importancia a la muerte, no disfrutan, no hacen lo que querían hacer durante la vida, con miedo a encontrarse con ella. Probablemente piensen que la muerte sea el fin de un ciclo, como río que desemboca en mar, algo que les detendrá de ser ellos mismos, que no sentirán nada o tal vez dejarían de existir como personas, pero otras personas pueden pensar también, que no hay solo una vida, que continuamente disfrutaremos de otras muchas vidas, que el cuerpo se quede en esta y que lo que perdura, es decir, nuestra alma con nuestras inquietudes, ilusiones, pensamientos, conocimientos y formas de pensar nos acompañe a cada una de ellas. La muerte es como el fin del día comienza a las doce y acaba a las doce , así pues sería un tiempo muerto en un partido, donde te has quedado, te has quedado y no hay marcha atrás ,no podemos detenerlo, es algo que nos arrebata de nuestros seres queridos y nuestras pertenencias, yo siempre la he comparado con un simulacro de incendios en un colegio, tienes que abandonar TODO lo que tienes y estás haciendo para poder dejar el colegio, tu vida.


Somos personas que necesitamos apoyarnos además en esperanza, en fe, a lo largo de la historia, y a través de la filosofía y de las creencias religiosas, se ha intentado desarrollar teorías que tratan de proporcionar mayor sensación de permanecer en este mundo. Estará el cielo o depende como fueras en tu anterior vida, el karma, o simplemente nos reencarnaremos en otro ser vivo. Esperanza, porque seguiremos aquí a pesar de abandonar a nuestros seres queridos.
Los griegos utilizaban el término mortal para referirse a que somos los únicos seres conscientes de que vamos morir. Otra definición sería una cesación o término de la vida.

No debemos estar preocupados por cómo va a ser o que pasará tras la muerte, no tenemos motivos, por estar nerviosos, no vamos a solucionar nada, cuando tenga que venir a llevarte ,vendrá ,mientras tanto no sirve de nada cuestionarse. Ninguna hipótesis va a ser cierta hasta que la comprobemos por nosotros mismos. Había filósofos que decían que no tendríamos que pensar en algo que llegará pero que no estamos viviendo, porque todo ser humano va a experimentar la muerte individualmente, se va a tener que enfrentar a ella, y como no podemos saber cuándo nos va a tocar hemos de vivir la vida al máximo para que no te quedes con ganas de haber hecho algo.

Es un tema que actualmente evitamos, simplemente porque nos pueda dar miedo, por eso los difuntos se les aparta fuera de nosotros, fuera de la ciudad. La vida por mi parte tiene un sentido de aprovecharla todo lo que puedas, para mejorar la vida de los demás y la tuya.
La muerte es nuestra sombra , nos observa en el libro de la vida.
El encuentro con el fin definitivo de nuestra vida puede ser tan fácil como un envenenamiento, o simplemente podemos buscarle sentido a vivir, y que, sin darnos cuenta ya nos toque marcharnos.


El miedo a la muerte no es algo en lo que tengamos que pensar constantemente ni amargarnos, pasándonos la vida preocupándonos por ella y por lo que venga detrás, sirviendo esto de reflexión por si verdaderamente todo esto merece la pena. ¿No es mejor buscarle un sentido desde que nacemos a la vida para que cuando nos toque marcharnos con la muerte, podamos decir y decirles a los que  nos rodean   ‘ no estéis tristes porque ha merecido la pena’?


No hay comentarios:

Publicar un comentario